Cochinillo a la brasa: mi receta

Receta ↓ Ángela Solar

¡El cochinillo a la brasa es la combinación perfecta de sabor y salud! Preparado con hierbas aromáticas y especias naturales, este plato es una delicia para el paladar y una opción saludable. Además, su cocción lenta a la brasa le da un sabor único y una textura tierna y jugosa que no encontrarás en otros platos. ¡Sigue esta receta y disfruta de un plato exquisito y saludable!

Ingredientes necesarios

Para conseguir este plato de diez, necesitarás reunir los siguientes ingredientes:

• Cochinillo – Elige uno de entre 4 y 5 kg. Recuerdo la primera vez que cociné cochinillo a la brasa, ¡fue en una barbacoa familiar y fue todo un éxito! Puedes usar lechón o cerdo también.
• Sal gorda – Necesitarás 2 cucharadas. La sal gorda es perfecta para este plato, ya que se adhiere mejor a la piel. Si no tienes sal gorda, puedes usar sal fina, pero asegúrate de reducir la cantidad.
• Pimentón dulce – Una cucharada será suficiente para darle un toque de color y sabor. El pimentón es uno de mis ingredientes favoritos, ¡le da un sabor único a todos los platos! Si prefieres un sabor más picante, puedes usar pimentón picante en su lugar.
• Comino molido – Utiliza 1 cucharada para realzar los sabores. Si no tienes comino, puedes usar cilantro molido como alternativa.
• Orégano seco – Agrega 1 cucharada para potenciar el sabor. El orégano seco es perfecto para este plato, ya que resiste bien la cocción a la brasa. Si no tienes orégano seco, puedes usar tomillo seco como sustituto.
• Aceite de oliva virgen extra – Utilízalo para darle jugosidad al cochinillo. El aceite de oliva virgen extra es un ingrediente básico en la cocina española, ¡no podíamos dejarlo fuera de esta receta! Si no tienes aceite de oliva, puedes usar otro aceite vegetal, pero el sabor no será el mismo.

Preparación previa del cochinillo

¡No podemos empezar a asar el cochinillo sin antes hacer unos pasos fundamentales para conseguir ese sabor y textura perfectos!

1. ¡Nada más satisfactorio que cocinar con ingredientes limpios y preparados a la perfección! Así que, antes de nada, asegúrate de eliminar cualquier resto de pelo o suciedad del cochinillo.
2. Una vez limpio, es hora de aplicar el adobo. Yo suelo usar una mezcla de sal, pimienta, ajo y hierbas aromáticas como el romero o el tomillo. ¡El secreto está en masajear bien la carne para que el adobo penetre en profundidad! 
3. Después de adobarlo, es importante dejarlo marinar durante varias horas o incluso toda la noche. Recuerdo cuando mi abuela me enseñó esta técnica: "Deja que los sabores bailen juntos durante un rato antes de invitarlos a la fiesta del asado". Así que no te impacientes y permite que la magia suceda. ¡Verás cómo la carne se vuelve más tierna y sabrosa! Además, este paso es clave para conseguir esa piel crujiente que tanto nos gusta.

El asado

¡Estamos a punto de darle vida a nuestro cochinillo a la brasa! Pero, antes de empezar, déjame contarte algunos trucos que he aprendido a lo largo de los años para conseguir unas brasas perfectas y un cochinillo jugoso y crujiente que dejará a tus invitados con la boca abierta.

Preparación de la brasa

Para mí, la clave está en el carbón vegetal. Siempre utilizo carbón de encina, ¡es el que más me gusta! Deja que se encienda bien y consigue unas brasas uniformes y de buen tamaño. Recuerdo cuando mi padre me enseñó a preparar la brasa: "Hay que tener paciencia y dejar que el fuego haga su trabajo", me decía.

Así que no te impacientes y espera a que las brasas estén listas antes de colocar el cochinillo. ¡Verás cómo esta pequeña espera marcará la diferencia en el sabor y textura de tu plato!

Asado del cochinillo

1. Coloca el cochinillo en una parrilla a una distancia de 20-25 cm sobre las brasas. Asegúrate de que el cochinillo esté bien sujeto y no se caiga. Yo suelo usar unas pinzas para ajustarlo y evitar que se queme por algún lado. ¡Este paso es crucial para conseguir una cocción uniforme y una piel crujiente!
2. Asa el cochinillo durante 2 horas y 30 minutos, dándole la vuelta cada 30 minutos para que se cocine uniformemente. Añade más carbón a la brasa si es necesario para mantener la temperatura.
3. Durante el proceso de asado, baña el cochinillo con aceite de oliva virgen extra cada vez que le des la vuelta para mantener la piel jugosa.
4. ¡Y no te olvides de probar la carne de vez en cuando para asegurarte de que está en su punto! La textura y el sabor de tu cochinillo dependerán de estos pequeños detalles.